Internet es un conjunto descentralizado de redes de
comunicación interconectadas que utilizan la familia de protocolos TCP/IP,
garantizando que las redes físicas heterogéneas que la componen funcionen como
una red lógica única, de alcance mundial. Sus orígenes se remontan a 1969,
cuando se estableció la primera conexión de computadoras, conocida como
ARPANET, entre tres universidades en California y una en Utah, Estados Unidos.
La historia de Internet se remonta al temprano desarrollo de las redes de comunicación. La idea de una red de ordenadores diseñada para permitir la comunicación general entre usuarios de varias computadoras sea tanto desarrollos tecnológicos como la fusión de la infraestructura de la red ya existente y los sistemas de telecomunicaciones.
Las más antiguas versiones de estas ideas aparecieron a finales de los años cincuenta. Implementaciones prácticas de estos conceptos empezaron a finales de los ochenta y a lo largo de los noventa. En la década de 1980, tecnologías que reconoceríamos como las bases de la moderna Internet, empezaron a expandirse por todo el mundo. En los noventa se introdujo la World Wide Web (WWW), que se hizo común.
La infraestructura de Internet se esparció por el mundo, para crear la moderna red mundial de computadoras que hoy conocemos. Atravesó los países occidentales e intentó una penetración en los países en desarrollo, creando un acceso mundial a información y comunicación sin precedentes, pero también una brecha digital en el acceso a esta nueva infraestructura. Internet también alteró la economía del mundo entero, incluyendo las implicaciones económicas de la burbuja de las .com.
Inicialmente Internet tenía un objetivo claro. Se navegaba
en Internet para algo muy concreto: búsquedas de información, generalmente.
Ahora quizás también, pero sin duda alguna hoy es más probable perderse en la
red, debido al inmenso abanico de posibilidades que brinda. Hoy en día, la
sensación que produce Internet es un ruido, una serie de interferencias, una
explosión de ideas distintas, de personas diferentes, de pensamientos distintos
de tantas posibilidades que, en ocasiones, puede resultar excesivo. El
crecimiento o más bien la incorporación de tantas personas a la red hace que
las calles de lo que en principio era una pequeña ciudad llamada Internet se
conviertan en todo un planeta extremadamente conectado entre sí entre todos sus
miembros. El hecho de que Internet haya aumentado tanto implica una mayor
cantidad de relaciones virtuales entre personas. es posible concluir que cuando
una persona tenga una necesidad de conocimiento no escrito en libros, puede
recurrir a una fuente más acorde a su necesidad. Como ahora esta fuente es
posible en Internet. Como toda gran revolución, Internet augura una nueva era
de diferentes métodos de resolución de problemas creados a partir de soluciones
anteriores. Algunos sienten que Internet produce la sensación que todos han
sentido sin duda alguna vez; produce la esperanza que es necesaria cuando se
quiere conseguir algo. Es un despertar de intenciones que jamás antes la
tecnología había logrado en la población mundial. Para algunos usuarios
Internet genera una sensación de cercanía, empatía, comprensión y, a la vez, de
confusión, discusión, lucha y conflictos que los mismos usuarios consideran la
vida misma.
¿Qué transformaciones están ocurriendo en la Era de la Información?
Es por todos
asumido que existe una relación íntima entre la tecnología y la
modificación de las formas sociales. Históricamente ha sido así. Y hoy, las tecnologías de la información están
transformando de forma inusual la sociedad postindustrial, y con ello, las
culturas en la edad llamada postmoderna.
Hoy todo es
información. Nos encontramos inmersos en el espacio referente
denominado comunicación-mundo. En los últimos tiempos, se habla continuamente
de una sociedad, para la que se han propuesto múltiples denominaciones,
y que se ve implicada constantemente en el quehacer diario.
La evolución
tecnológica (la sustitución del átomo por el bit y de lo físico por lo
digital a un ritmo exponencial ha convertido al homo sapiens en homo digitalis),
las transformaciones en el mundo de las comunicaciones (la transmisión
de elevados volúmenes de información), el
Internet (medio universal de
comunicación y búsqueda de información a muy bajo coste.), la “escritura
digital” (revolución de los medios), el teletrabajo (que implica mantener
simultáneamente una centralización lógica y una descentralización física,
aplicables a cualquier tarea intensiva en información), la telecompra interactiva
(supermercados virtuales, nuevas conceptualizaciones en la publicidad y
nuevos inter-anuncios), la telemedicina (que no moverá físicamente a los
pacientes, sino electrónicamente la información), o la tele-educación (que comportan
interactividad, posibilidad de que los ordenadores se conviertan per
se en todos
los medios actuales) son algunas características de esta ya “nueva sociedad”.
Todo ello, evidentemente, ha provocado importantes impactos socioeconómicos.
Caminamos hacia un mundo en que serán menos apetecidos
los bienes y más los servicios.
Las técnicas
documentales también están siendo transformadas, como no podía ser
de otra forma. El desarrollo y popularización de la informatización (universalización
de lo digital), los avances en telecomunicaciones (universalización
del acceso a las telecomunicaciones) y la consolidación del audiovisual
como medio universal y dominante de la comunicación (universalización
del audiovisual)5 están provocando que algunos de los aspectos que
siempre han sido consustanciales al documento estén siendo modificados.
En este orden de cosas, todos los aspectos del proceso documental
(selección, adquisición, almacenamiento, difusión y servicio, etc.) se ven
afectados por esta nueva realidad, de tal forma que el bibliotecario, documentalista
o archivero actual no limita su campo de actuación a unos determinados
fondos, unos determinados usuarios y a unos determinados servicios,
sino que cada uno de estos aspectos puede verse hecho crecer de una manera
casi ilimitada. Desde este punto de vista, el gestor de la información
puede ver ampliadas sus posibilidades de actuación hasta límites impensables
hasta hace muy poco tiempo.
¿Quién es Manuel Castells y cuáles son sus nuevos aportes para la comprensión del presente?
Manuel Castells Oliván (Hellín, Albacete, España, 9 de
febrero de 1942) es un sociólogo y profesor universitario, catedrático de
Sociología y de Urbanismo en la Universidad de California en Berkeley, así como
director del Internet Interdisciplinary Institute en la Universidad Abierta de
Cataluña.
En los últimos veinte años ha llevado a cabo una vasta
investigación en la que relaciona la evolución económica y las transformaciones
políticas, sociales y culturales en el marco de una teoría integral de la
información, cuyo ejemplo más claro puede ser el Proyecto Internet Catalunya
que coordina. Los resultados de su trabajo se recogen en la trilogía La Era de
la Información, traducida a varios idiomas y que ha sido encumbrada por Anthony
Giddens, asesor de Tony Blair, al nivel de los esfuerzos explicativos que Marx o
Max Weber hicieron por interpretar la sociedad industrial.
En palabras de Manuel Castells, "La Era de la
Información" es nuestra era:
Es un periodo histórico caracterizado por una revolución
tecnológica centrada en las tecnologías digitales de información y
comunicación, concomitante, pero no causante, con la emergencia de una
estructura social en red, en todos los ámbitos de la actividad humana, y con la
interdependencia global de dicha actividad. Es un proceso de transformación
multidimensional que es a la vez incluyente y excluyente en función de los
valores e intereses dominantes en cada proceso, en cada país y en cada
organización social. Como todo proceso de transformación histórica, la era de
la información no determina un curso único de la historia humana. Sus
consecuencias, sus características dependen del poder de quienes se benefician
en cada una de las múltiples opciones que se presentan a la voluntad humana.
Es un periodo histórico caracterizado por una revolución
tecnológica centrada en las tecnologías digitales de información y
comunicación, concomitante, pero no causante, con la emergencia de una
estructura social en red, en todos los ámbitos de la actividad humana, y con la
interdependencia global de dicha actividad. Es un proceso de transformación
multidimensional que es a la vez incluyente y excluyente en función de los
valores e intereses dominantes en cada proceso, en cada país y en cada
organización social. Como todo proceso de transformación histórica, la era de
la información no determina un curso único de la historia humana. Sus
consecuencias, sus características dependen del poder de quienes se benefician
en cada una de las múltiples opciones que se presentan a la voluntad humana.
¿Qué es es la Web 2.0 y qué cosas están transformándose con ello?
El término Web 2.0 comprende aquellos sitios web que
facilitan el compartir información, la interoperabilidad, el diseño centrado en
el usuario1 y la colaboración en la World Wide Web. Un sitio Web 2.0 permite a
los usuarios interactuar y colaborar entre sí como creadores de contenido
generado por usuarios en una comunidad virtual, a diferencia de sitios web
estáticos donde los usuarios se limitan a la observación pasiva de los
contenidos que se han creado para ellos. Ejemplos de la Web 2.0 son las
comunidades web, los servicios web, las aplicaciones Web, los servicios de red
social, los servicios de alojamiento de videos, las wikis, blogs, mashups y
folcsonomías.
Aunque el término sugiere una nueva versión de la World Wide
Web, no se refiere a una actualización de las especificaciones técnicas de la
web, sino más bien a cambios acumulativos en la forma en la que desarrolladores
de software y usuarios finales utilizan la Web. El hecho de que la Web 2.0 es
cualitativamente diferente de las tecnologías web anteriores ha sido
cuestionado por el creador de la World Wide Web Tim Berners-Lee, quien calificó
al término como "tan sólo una jerga"- precisamente porque tenía la
intención de que la Web incorporase estos valores en el primer lugar.
La Web 2.0 ha originado la democratización de los medios
haciendo que cualquiera tenga las mismas posibilidades de publicar noticias que
un periódico tradicional. Grupos de personas crean blogs que al día de hoy
reciben más visitas que las versiones online de muchos periódicos. La Web 2.0
ha reducido considerablemente los costes de difusión de la información. Al día
de hoy podemos tener gratuitamente nuestra propia emisora de radio online,
nuestro periódico online, nuestro canal de vídeos, etc. Al aumentar la
producción de información aumenta la segmentación de la misma, lo que equivale
a que los usuarios puedan acceder a contenidos que tradicionalmente no se
publican en los medios convencionales.
¿Qué es la configuración profesional compartida?
Son aquellos profesionales de la
documentación que deben adaptarse a la era de la información y los
avances tecnológicos para realizar su trabajo adecuadamente. El
adaptarse a estas nuevas tecnologías será en beneficio de los
profesionales a la hora de desempeñar su tarea de forma mas eficaz.
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